Así, imponente, con actitud rockera y sabrosor tropical…así se aparece ante nuestros ojos este sexteto queer (palabra que define una sexualidad fuera de todas las definiciones establecidas) que bien podríamos definir como “rockumbiero” o, como dicen ellas, “tropi-punk”. Se conocieron en un festival de música en el 2006 y, según Ali -la vocalista-, “fue amor a primera vista”. Desde entonces se unieron para fusionar la cumbia y el rock con algo de reggeton y hip hop. Hoy agitan las caderas del público más cool y también del más marginado. Sus temas celebran la fiesta y el ocio, hablan de sentimientos y asuntos cotidianos. Con cuna en Buenos Aires y México DF, recorrieron el mundo: de América Latina a Europa, pasando por Brasil, Chile, Alemania, Dinamarca y Suecia. Apoyan la libertad de elección de género, sexo y maternidad. Van por su tercer disco y confiesan que su sueño es ir de Ushuaia a Tijuana y terminar tocando en Japón. Y sí, al ritmo que van, todo es posible. (www.kumbiaqueerscom.ar)
