Por Ricardo Guaglianone
18 de abril de 2015
El Dakar 2016 se correrá nuevamente en Perú, Bolivia y Argentina con final en Rosario, a pesar de las fundadas críticas de organizaciones ambientalistas de los países participantes.
La nueva edición del rally se iniciará en Lima, el 3 de enero de 2016, luego irá por Bolivia, cruzará hacia Argentina y finalizará en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe.
El lanzamiento oficial en el Pavillion Wagram de París contó con la presencia del ministro de Cultura de Bolivia, Marko Machicao, el consejero de Comercio Exterior y Turismo de Perú en Francia, Aldo Parodi y Enrique Meyer, ministro de turismo argentino.
También estuvieron presentes Marie Odile Amory, presidenta de Amaury Sport Organization (ASO), la empresa organizadora y el director del Dakar, Etienne Lavigne, quien señalo al ministro de la Argentina, Enrique Meyer, como el responsable de llevar el Dakar a Sudamérica.
Esta será la 38° edición de la competencia y la octava en Sudamérica, que tendrá una extensión de 8500 kilómetros divididos en etapas: 3 etapas en Perú, 5 en Bolivia, 6 en Argentina y en esta ocasión, algunas denominadas ‘maratón’, serán sin asistencia técnica para profundizar el riesgo de los competidores y hacer más dramática la travesía.
Haciendo caso omiso a las fundadas críticas que tiene la competencia por la enorme destrucción de sitios arqueológicos, paisajes, vida silvestre y contaminación que provocan a su paso los más de 500 vehículos, el ministro nacional se deshizo en elogios para la competencia:
“Los argentinos estamos muy felices de que nuevamente el Dakar esté en nuestro país, que el día de descanso sea en Salta y que finalice en el Monumento a la Bandera en Rosario”… “el Dakar es la mayor vidriera turística del mundo para mostrar los paisajes, la cultura y la calidez de nuestra gente”.
Ocultando las verdaderas razones del rechazo de Chile a participar nuevamente de esta violenta competencia declaró: “ Nuestro país tras el abandono forzado de Chile, es el único país fiel a todos los Dakar americanos».
El Dakar comenzará en Lima, Perú, el 1 y 2 de enero con las Verificaciones Técnicas, el día 3 es la largada simbólica en Lima; luego seguirá por Bolivia en tres departamentos: La Paz, Oruro y Potosí para finalizar en el Monumento a la Bandera en Rosario.
El recorrido de cada una de las jornadas será anunciado el próximo 28 de Abril en Buenos Aires, en una conferencia de prensa donde estará presente el ministro Meyer y las autoridades del Dakar.
Porque no participa Chile
Autoridades y activistas ecologistas chilenos vienen expresando el rechazó a la competencia desde el Rally Dakar 2010. Ese año la alcaldesa chilena de San Pedro de Atacama, oasis ubicado en medio del desierto, señaló su oposición a que la prueba pase por allí.
Se trata de una «amenaza ecológica con un impacto ecológico muy grande «, señaló Sandra Berna, alcaldesa del pueblo, habitado mayoritariamente por indígenas y uno de los destinos turísticos más importantes de Chile. La organización ecologista Partido Verde apoyó a la dirigente realizando protestas un mes antes del inicio de la competencia
A su vez, en 2011, la Universidad de Chile señaló que, según informes de daños elaborados por el Consejo de Monumentos Nacionales, desde 2009 a 2011 se constató la destrucción varios geoglifos y de 283 sitios arqueológicos, equivalente al 58,2% de los más de 570 sitios registrados en dicho país.
A raíz de este informe, un grupo de organizaciones civiles presentaron acciones judiciales, entre ellas un recurso de protección, por la destrucción de estos sitios arqueológicos producto del Dakar que fue rechazada por la Corte Suprema de Chile .
Sin embargo, el Consejo de Defensa del Estado y el Consejo de Monumentos Nacionales, se hicieron eco de las protestas e hicieron pública una declaración de oficio en el 2012 basada en los daños detectados, sumando las denuncias de particulares de otros seis sitios destruidos.
Chile ya había puesto en duda su participación por el monto que tiene que abonar a los organizadores del Dakar -entre US$4 y US$6 millones de dólares- y por la oposición de grupos que protestan por el daño que la carrera ha provocado al medio ambiente.
Para lograr este rechazo, organizaciones civiles se aliaron con las comunidades indígenas de las regiones donde se corrió el rally y presentaron un demanda invocando un convenio que obliga a que los pueblos originarios sean consultados sobre el uso de sus territorios.
La postura chilena fue apoyada por el ingeniero Klaus Hönninger, director del Museo Paleontológico Meyer-Hönninger de Perù, que sostiene que tampoco los peruanos deberían permitir otra edición del rally por el gran daño que sufrió el patrimonio nacional, como los registrados en el desierto de Ocucaje y en las Líneas de Nasca.
Las denuncias en Argentina
La Fundación para la defensa del ambiente (FUNAM) de la ciudad de Córdoba, viene denunciando al Rally Dakar desde el 2008 por ser una gran amenaza ambiental para Córdoba y otras provincias cuestionando duramente el paso de la competencia por territorio cordobés.
La fundación es patrocinada por el Dr. C. Aníbal Paz, que acompañó a FUNAM en su exitosa acción de amparo contra un recorrido del Rally Internacional Argentina 2008 que pretendía realizarse dentro del Parque General San Martín, un área protegida. En enero de ese año FUNAM presentó una acción de amparo contra el Dakar 2009 y logró que los recorridos secretos (una condición casi colonial del rally), pudieran ser conocidos.
El Dr. Raúl Montenegro, presidente de FUNAM denuncio reiteradamente, que los países del Norte usan a nuestros países para sus juegos peligrosos sin ninguna justificación racional, afectando ecosistemas frágiles y destruyendo sitios arqueológicos con total impunidad.
Las sierras de Córdoba, lugar donde se ‘fabrica’ el agua de los principales ríos y de las principales cuencas de aguas subterráneas, están muy deterioradas por los desmontes, cultivos, loteos e incendios. Montenegro denunció que en Córdoba «ya se perdió el 95% de sus bosques nativos y casi el 100% de sus pastos naturales”.
Montenegro es profesor titular de Biología Evolutiva en la Universidad Nacional de Córdoba se opone al despilfarro de los escasos recursos naturales de la provincia: “nuestros ecosistemas están frágiles y lo importante es proveer de agua a las comunidades locales y a los turistas que nos visitan anualmente, no a una competencia que destruye todo a su paso”.
Las organizaciones ecologistas en el país, denuncian al “Rally colonial” por sus altos consumos de agua y combustible, por la contaminación que dejan a su paso, la destrucción de sitios vírgenes y el abandono de toneladas de desechos contaminantes en el ambiente.
Ciertamente, el Rally Dakar no es una competencia lineal de vehículos, sino una ancha franja de autos, camionetas, camiones y motos, que atraviesan zonas arenosas frágiles y únicas destrozando a su paso el suelo y la vegetación nativa. En Europa no los dejarían, vienen a países donde las autoridades irresponsablemente, los reciben con brazos abiertos y subsidios.
Carta Abierta de la Universidad de México
Sin tener el Dakar en su territorio, la Universidad Autónoma de México ha estudiado los impactos que causa el Dakar en el medio ambiente y sentaron posición para solidarizarse con las organizaciones ecologistas que hace años vienen denunciando el atropello y la irracionalidad de esta competencia:
El Rally Dakar, un evento presuntamente deportivo, ha sido pensado en realidad, solo para competencia (y complacencia) de ricos y para probar exquisitas máquinas último modelo antes de su salida al mercado internacional, además de ser altamente destructivo de paisajes y elementos culturales.
Esta pseudo-competencia “deportiva” encierra las siguientes fallas esenciales que la hacen totalmente incompatible con una protección seria y responsable del patrimonio natural y cultural de nuestra región:
1) Parte de un supuesto, maliciosamente falseado, de que “en el desierto no hay nada”, y, por tanto, se puede pisotear todo y transitar por cualquier parte. Arqueólogos, paleontólogos, geólogos, paleoecólogos y paleobotánicos saben que el subsuelo de la pampa es una mina de hallazgos del pasado, por cierto totalmente ocultos hoy a la vista.
2) En la pampa y en los desiertos, se ha hallado varias veces ejemplares de la fauna extinta del Terciario y Cuaternario, en ejemplares de extraordinario valor científico (especies nuevas para la ciencia).
3) Una de sus antiguas y venerables vías, el Qhapaqñan o “Camino del Inca”, cruza la Pampa, desde Quillagua al Norte bordeando el Salar de Llamara. Hemos constatado, hace unos meses atrás, cómo los vehículos pesados del Dakar siguieron matemáticamente, por espacio de más de 30 km esta misma vía incaica, situación delictiva que oportunamente advertimos, como equipo de estudio del Camino del Inca (Proyecto Universidad Arturo Prat) al Consejo de Monumentos Nacionales el año 2014.
Hasta un niño bien formado es capaz de entender lo que ocurre, al ver cómo se vulnera el paisaje del desierto y destroza sin piedad y se masacra su superficie, en la cual hubo vida hace miles o millones de años atrás. Podríamos citar numerosos casos de hallazgos notabilísimos hechos en plena pampa, donde nada a la vista salvo unas cuantas piedras.
La Pampa no es un desierto absoluto carente de vida: es un libro abierto para el que quiere y ha aprendido a leer en ella. Para ello, sin embargo, hay que ilustrarse profundamente e investigar. Y esa es, precisamente, la función del científico que da a conocer el peligro que entrañan estas competencias off-road (es decir, “a campo traviesa”)
El Dakar es un verdadero “huracán”, altamente destructivo, cuyo único objetivo es satisfacer el insaciable apetito de poderosas empresas del gremio automotriz y aplacar esa “hambre de pan y circo”, tan propia de nuestra pobre humanidad aburrida y carente de estímulos superiores en el campo de la cultura.
Por Dr. Horacio Larrain Barros (Universidad Nacional Autónoma de México )
Antropólogo cultural y arqueólogo. Investigador del “Camino del Inca”,
La contradicción de Evo Morales
Bolivia es uno de los países participantes del Dakar 2016 y se sienten felices a recibir esta verdadera máquina de destruir, contradiciendo la filosofía milenaria de los pueblos indígenas que habitan esas tierras. Filosofía volcada en sus leyes constitucionales.
Que dice el texto promulgado de la Ley de Derechos de la Madre Tierra, único reconocimiento legal a nivel mundial: el texto confiere a la ‘Madre Tierra’ el carácter de sujeto colectivo de interés público, a fin de garantizar sus derechos (Art. 5).
Asimismo, la norma define a este nuevo sujeto jurídico como “el sistema viviente dinámico conformado por la comunidad indivisible de todos los sistemas de vida y los seres vivos, interrelacionados, interdependientes y complementarios, que comparten un destino común” (Art. 3).
Asimismo, el documento crea la Defensoría de la Madre Tierra, “cuya misión es velar por la vigencia, promoción, difusión y cumplimiento de los derechos de la Madre Tierra” (Art. 10).
Rally Dakar: 500 idiotas en la línea de partida
Desde sus inicios, la competencia ha tenido 20 participantes muertos, 50 con espectadores incluidos, otros tantos accidentados, miles de vehículos rotos, decenas de litros de combustible desparramados en lugares vírgenes. Destruyeron sitios arqueológicos irremplazables
Existen historias de tipos que juraron no volver a correrla nunca más, denunciando el desprecio a la vida que manifiestan sus organizadores: “si no hay alguna muerte, no es un Dakar”. Sus 9000 kilómetros, en 15 días (con unas 5 horas de sueño promedio, por día) hacen que el raid no sea para cualquiera.
Cada día es un desafío contra la muerte. Cada día, al llegar al bivouac, los pilotos tienen una nueva anécdota que contar, que va desde la reflexión filosófica hasta la casi deshidratación bajo el sol del mediodía y no les importa nada, salvo satisfacer su ego.
El Rally Dakar es una competencia patética, que las autoridades nacionales deberían prohibir luego de tantas denuncias recibidas de parte de organizaciones ecologistas y dejar de lado la mentira de que es importante para el turismo nacional. En realidad es una claudicación ante los poderosos que se creen dueños de cada pedacito de la tierra.
