Destacados en Villa General Mitre

Instituto “Cabrini”, Misioneras del Corazón de Jesús

El instituto fue creado por la madre Cabrini, en 1901, durante su segundo viaje a nuestro país. En este viaje, la madre se reencontró con el padre Darío Broggi y le solicitó que atendiera a los pobladores de “Villa Mitre”, en general italianos, que apenas sobrevivían cultivando su “quintas” y cuidando sus gallineros, pero estaban abandonados en la vida espiritual e incluso cultural. El 2 de marzo de 1901 la madre Cabrini, compra los terrenos de Villa Mitre y Flores, tres manzanas desde el arroyo Maldonado a San Matías. Las memorias de la comunidad recuerdan sobre el barrio y el terreno: “era un chalet abandonado, rodeado de árboles y un gran campo (…) vive una población de inmigrantes atraídos por la esperanza de la fortuna, todos inmersos en un trabajo afanoso”. De estos testimonios surge claramente el principal motivo que indujo a la madre Cabrini a instalar una misión en este barrio: la necesidad de asistir espiritual y materialmente a la gran legión de inmigrantes italianos que vivían en estado de marginalidad social.

Picasso en Villa Gral. Mitre

En uno de los vértices del barrio (esq. Apolinario Figueroa y Av. San Martín), límite con Caballito, se halla un mural copia del famoso cuadro de Picasso, “Guernica”. Hecho sobre la pared de un depósito de hierro y chapas, junto a la escuela Andrés Ferryera, este mural representa el tributo de un grupo de alumnos de Bellas Artes, y fue restaurado por “Compartir”, una asociación de vecinos de la zona.

Café La Humedad
Un lugar de entretenimiento y encuentro social del barrio es el famoso Café La Humedad de las esquinas Gaona y Boyacá. El bar se hizo célebre por el tango de Cacho Castaña, músico nacido en el barrio de Flores. Allí traza el fresco biográfico de una vida de juventud:
“Café La Humedad, billar y reunión… Sábado con trampas… ¡Qué linda función! Yo solamente necesito agradecerte la enseñanza de tus noches que me alejan de la muerte. Café La Humedad, billar y reunión… Dominó con trampas. ¡Qué linda función! Yo simplemente te agradezco las poesías que la escuela de tus noches le enseñaron a mis días.”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *