Los vecinos del barrio porteño Saavedra y los bonaerenses de La Matanza están preocupados por el rumor que las plantas de incineración de la basura de la ciudad se harán en esos lugares, instalando plantas de última generación que según los funcionarios “no provocan ningún daño ambiental ni perjudican la salud”, cuestión que los vecinos, resignados, no creen en absoluto.
En tiempo record, el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires aprobó una ley para incinerar basura, que generará, más allá de las declaraciones edulcorantes de los funcionarios, una grave contaminación ambiental.
Las plantas de reciclado de basura en la ciudad de Buenos Aires, que se armaron con la nueva ley de ‘basura cero’ quedarían inoperantes o en una versión mínima y se eliminará la separación selectiva de residuos.
Mientras el Gobierno de la ciudad de Buenos Aires promueve a la capital argentina como una ciudad “verde”, al mismo tiempo impulsò una ley de quema de basura que podría llegar a generar un grave impacto ambiental.
Los camiones estarán transportando una mercancía muy valiosa, ya que cada planta costará más de 500 millones de dólares y para eso, para lo que el Gobierno porteño tomará nuevos endeudamientos, pero en ciudad verde, todo está previsto.
Larreta no tendrá problemas en cambiar leyes que permitan este descalabro ambiental porque posee mayoría en la Legislatura, por lo tanto, va a cambiar leyes como la del año 2007 que prohibía la incineración de residuos.
Una ley que además, atenta contra los únicos recicladores eficientes de basura, conocidos en Argentina como cartoneros, que obtienen pequeñas ganancias para sobrevivir separando los materiales.
