La Asociación de Funcionarios y Abogados por los Derechos de los Animales (AFADA) presentó un hábeas corpus colectivo ante la justicia porteña para solicitar que se declare «sujetos de derecho no humano» a tres chimpancés que viven en el Ecoparque, con el objetivo de que sean liberados y trasladados a un santuario en Brasil y el Tribunal Superior de Justicia porteño acepto la petición.
El fallo del tribunal no hizo lugar a la queja de la Asociación por el fallo de la sala I de la Cámara de Apelaciones del Fuero Penal que había confirmado el rechazo en primera instancia que dictó el juez Norberto Tavosnanska, a cargo del juzgado en lo Penal Contravencional y de Faltas N°17 de la Ciudad.
El litigio se remonta al 28 de noviembre de 2017, cuando Tavosnanska rechazó el hábeas corpus presentado por los animalistas en “atención a la preocupante situación” en la que se encontraban los primates” cuando el gobierno porteño había comenzado la transformación del ex zoológico en Ecoparque.
Ya existía un antecedente de jurisprudencia nacional e internacional sobre el tema. La justicia de Mendoza, tras una presentación de la ONG, había declarado “sujeto de derecho no humano” al chimpancé Cecilia y la trasladó al Santuario de Grandes Primates de Sorocaba, en San Pablo.
En otro fallo, la Justicia porteña declaró a la orangutana Sandra “un sujeto no humano titular de derechos fundamentales” y que “como un sujeto, su cautiverio y exhibición viola los derechos que ella titulariza, aunque se le alimente y no sea tratada con crueldad”.
Sin embargo, tanto en primera instancia como en Cámara dijeron que “no es posible asimilar a los animales a personas humanas” y dieron por concluido el reclamo sin expresarse sobre el verdadero motivo, que es el estado de los animales.
El fallo de la Cámara de Apelaciones, para la que los animales “poseen derechos, garantías y obligaciones”, sostuvo que el hábeas corpus no resguarda “el derecho a la libertad de quienes no son personas humanas”.
Para la abogada Laura Velasco, del Instituto de Derecho Animal, la decisión judicial “es una regresión en la jurisprudencia argentina. Y es regresivo porque no consideran a los animales seres sintientes y conscientes de acuerdo a la Declaración de Cambridge del año 2012, donde importantes neurocientíficos del mundo se reunieron y declararon que los animales no humanos tienen conciencia.
Entre ellos estaba Philip Low –investigador del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y ex asesor de la administración del Presidente Barack Obama–. También Stephen Hawking apoyó la declaración que sostiene que los animales tienen los sustratos neurológicos necesarios para generar conciencia y la capacidad de sentir dolor, placer, miedo y temor como los seres humanos.