Llegaron al país dos nuevas subestaciones eléctricas móviles
Llegaron a la Argentina las dos primeras subestaciones eléctricas móviles. Una de ellas se instalará en el barrio de Villa Santa Rita para sumar mayor capacidad de potencia a la red de alta y media tensión.
La puesta en funcionamiento de esta subestación móvil permitirá mejorar la calidad de servicio a 120.000 vecinos de los barrios de la comuna 11 (Villa Santa Rita, Villa del Parque y Villa General Mitre).
Se trata de dos de las tres subestaciones que llegarán en diciembre al país. Esta nueva tecnología, adquirida con financiación del Ministerio de Planificación, reforzará mucho la prestación del servicio para la distribuidora eléctrica. La central fue trasladada en avión y llegó del jueves 3 de al Aeropuerto Internacional de Ezeiza procedente de Portugal.
La subestación móvil está compuesta por tres módulos:
– uno de alta tensión,
– otro módulo transformador
– y el último de media tensión.
La longitud de cada módulo es de 30 metros de largo y su peso es apenas superior a las 78 toneladas. Por esta razón, el avión usado para su traslado fue un Antonov 124, de origen ruso, uno de los aviones más grandes del mundo. Hasta ahora sólo fue superado en tamaño por el Airbus A380 y por el Antonov 225.
La caravana para trasladar la subestación móvil alcanzó los 200 metros de largo y fue acompañada por efectivos de Gendarmería Nacional.
Se estima que en una semana estará instalada en la Subestación Santa Rita, ubicada en la calle Juan Agustín García al 3000, con el fin de atender el sostenido incremento de la demanda en esa zona de la ciudad.
Es importante este aporte en el servicio, ya que en la zona de la comuna 11 como en el resto de la ciudad, se habilitaron edificios que funcionan solo con energía eléctrica, generando un consumo excesivo que ahora podrá ser atendido sin perjudicar a los vecinos de los distintos barrios.
Las 2 subestaciones móviles se instalarán en las Subestaciones Liniers y Azcuénaga, en el sur de la ciudad. La inversión para este equipamiento fue de 143 millones de pesos.
Esta subestación móvil de 35 MVA, con una inversión de 47 millones de pesos permitirá mejorar la calidad de servicio de los barrios mencionados.
¿Existen riesgos con las subestaciones eléctricas?
En nuestro país la instalación de subestaciones eléctricas fue importante en Córdoba, Jujuy, Misiones y Buenos Aires. Los vecinos que viven cercanos a estas instalaciones buscan lograr la relocalización en áreas menos pobladas. En el conurbano bonaerense hay centrales instaladas en los barrios de Ezpeleta, Berazategui, Wilde, Claypole y Florencio Varela y los vecinos están pidiendo su traslado.
El caso de de la subestación Sobral, ubicada en Ezpeleta, es reflejo de estos pedidos: hay centenares de vecinos que viven cercanos a la subestación que padecen enfermedades que las asocian con la actividad de la central.
Microtesla (µT) es la unidad de valor que se utiliza para medir campos magnéticos. Estudios internacionales avalados por la OMS afirman que las personas expuestas a campos magnéticos superiores a 0,3 (µT) tienen riesgo de contraer enfermedades graves.
Sin embargo, en nuestro país está vigente la Resolución 77/98 de la Secretaría de Energía de la Nación la cual establece que las personas pueden estar expuestas a 25 (µT).
La subestación eléctrica Sobral de Espeleta funciona desde 1989. A pesar de las quejas vecinales, Edesur y el ENRE (Ente Nacional Regulador de la Electricidad) amparan su accionar en la resolución 77/98 que no contempla los límites de exposición a campos electromagnéticos avalados por la OMS.
Hace unos 8 años, el biólogo Raúl Montenegro realizó la medición de los campos electromagnéticos de las casas de los vecinos de la subestación Sobral. Encontró una radiación de entre 3 y 5,7 (µT), cifra que en algunos hogares alcanzó los 15 (µT).
Gladys Solioz, gestora de la organización Vecinos Autoconvocados por la vida, confeccionó “el mapa de la muerte”. En él se ilustran los casos de enfermedades producidos desde la instalación de la subestación. Lilian Magallanes, pediatra de una sala de primeros auxilios próxima a la Subestación afirmo a medios locales: “desde que la central funciona aumentaron las consultas por alergias, mareos, dolores articulares e infecciones que en muchos casos derivaron en situaciones màs graves”.
En el caso de estas subestaciones nuevas que se colocara en el barrio de Santa Rita, hay vecinos que ya han expresado su interés, una vez que pase el verano, que es la época de mayor problemas con el suministro eléctrico, de hacer gestiones para asegurar que estas subestaciones no generen a futuro, problemas más graves que la falta de energía eléctrica.
