Un novedoso desarrollo que lidera el científico Federico Ariel logra que las plantas puedan defenderse solas evitando el uso de agroquímicos nocivos para la salud. Ariel se dedicó durante muchos años a estudiar la biología y la bioquímica del ARN en plantas, el ácido que funciona a la par del más famoso ADN. Se dio cuenta de que se podía usar ARN exógeno y rociarlo en las plantas en forma de spray para que éstas lo absorban.
“Si podemos darles ARN a las plantas y éstas lo pueden leer, significa que podemos comunicarnos con ellas y brindarles información. Pero, ¿qué les decimos? Nos propusimos ofrecerles información sobre los patógenos y ver si generaban defensas. Y funcionó”, cuenta Ariel.
El equipo le arrojó a las plantas secuencias de genes muy importantes del patógeno, éstas lo absorben y generan pequeños ARN que cumplen una función comparable a los anticuerpos, porque bloquean esos genes en el patógeno.
Así, se evita el uso de pesticidas. “Hoy tenemos la capacidad no solo de exportar en algún momento alimentos tratados con ARN, más saludables al ser libres de agrotóxicos, sino que además podríamos exportar la tecnología para que se use en otros países”.
