12 de abril de 2015
A esta conclusión llega el informe del Barómetro de la Deuda Social que midió el grado de felicidad de los adultos mayores en el país para la Universidad Católica Argentina y la fundación Navarro Viola, que entre otras cosas analizó la autosatisfacción con la propia vida.
Según los resultadosde esta encuesta nacional, el 84,6% de los argentinos mayores de 60 años se define como una persona feliz. Enrique Amadasi, doctor en sociología y coordinador del Barómetro de la Deuda Social expreso con total crudeza sus prejuicios a la hora de encarar el trabajo:
«No es un dato menor. Esperábamos encontrar más gente infeliz, dado que ocho de cada diez personas de esa edad viven con la jubilación mínima».
Para este trabajo se analizaron las respuestas de unas 6000 personas durante las encuestas de monitoreo hechas entre 2010 y 2013. Los resultados son representativos de un universo de seis millones de mayores de 60 años que viven en el país.
Tres grandes grupos dieron la respuesta “soy muy feliz”: el primero es el de las personas de estratos socioeconómicos altos. El segundo, el de los que se percibían como personas sanas. Y el último: aquellos que viven en su casa con personas de su misma edad o con su pareja.
El estudio, titulado «Condiciones de vida e integración social de las personas mayores , no se focaliza en las razones que llevan a las personas de mayor edad a ser felices, sino que busca comprender qué factores sociales, ambientales, económicos, entre otros, hacen que alguien se sienta infeliz.
¿Influye la edad en el aumento de la infelicidad en la población?
Los investigadores encontraron que tiene un declinar mucho más leve que el que se podría imaginar: entre los mayores de 60 años hay apenas un 8% más de personas infelices que entre quienes tienen entre 18 y 35 años.
Según el estudio, a medida que pasan los años, no somos más felices y se alcanza con mayor frecuencia la paz espiritual. El concepto de «felicidad» como un objetivo a alcanzar, como un valor en sí mismo, caracteriza a las generaciones más jóvenes, pero es reemplazado por el de paz interior entre quienes más años han vivido.
En el estudio, el 83,6% de las personas mayores de 60 años declaró que siente paz espiritual. «Esto es una buena noticia en sí misma, no debe pasarse por alto», dice el documento.
¿A qué factores está asociada la paz espiritual? «Aumenta con la edad, como si se tratara de una especie de bonus que se consigue con el tiempo vivido», según detalla el informe.
El estudio de la UCA traza una relación directa entre la felicidad y el nivel educativo y socioeconómico: «Probablemente el dinero tiene que ver con la felicidad y la carencia de recursos hace a la infelicidad».
Los números de la encuesta indican que sólo el 10 por ciento de las personas mayores de 60 años del estrato socioeconómico más alto dijo sentirse infeliz, contra el 20,9 por ciento de las personas mayores del estrato más bajo.
Algo similar ocurrió al analizar el nivel educativo. Aquellos mayores de 60 años que no terminaron la secundaria son más infelices que los que concluyeron sus estudios.
La felicidad en la edad adulta tiene que ver también, con dónde se vive y con quién. El mayor grado de infelicidad del estudio se encontró entre las personas mayores que viven solas: son el 21,8% y las personas de bajos recursos que se sienten infelices son el 20,9%, según la encuesta de la Universidad Catòlica.
Fuente: La Nación
