“Le deseo a la Argentina, mucho más que un campeonato de fútbol, le deseo que salga la ley de medios”.
Se enfrentó durante años al monopolio y a los negocios del fútbol en manos de Torneos y Competencia, apoyó abiertamente la televisacion gratuita de los partidos por la señal publica, tuvo una visión favorable a la vuelta del sistema de aportes previsionales a manos del Estado, critico fuertemente la Ley de Glaciares vetada por la presidenta y fue letal con los casos de corrupción de funcionarios oficiales. Históricamente enfrentado, casi en soledad, al poderoso grupo Clarín, sosteniendo sus puntos de vista por el poder de su convicción y la coherencia en la defensa de sus valores, Víctor Hugo Morales habla en esta entrevista de su visión acerca de la ley de medios. Católico convencido, reclama la separación de la Iglesia y el Estado, critica a las autoridades esclesiaticas cuando corresponde y agradece a Dios por su presente. Reconoce su origen humilde que sostiene, es parte de su fortaleza para mirar el futuro. Es un guerrero con una fortísima formación profesional y ética, perseverante con sus convicciones sostenidas a lo largo de muchos años de exposición pública. Denuncia que los grandes medios manipulan la actualidad para favorecer intereses particulares denigrando la actividad periodística. Frontal, transparente, esta al tope en audiencia con su programa “La mañana de Víctor Hugo” en la franja de 9 a 13 hs, en Radio Continental.
Rechazó ofertas del gobierno para ser la voz del mundial en la televisión publica y también ofrecimientos de los grandes grupos para desarrollar su actividad, anteponiendo sus convicciones al interés económico.
Les ofrecemos la entrevista y agradecemos a Víctor Hugo Morales la deferencia de habernos recibido en Radio Continental, con tanta calidez humana.
Con el gran debate que se esta dando por el tema de la ley de medios y el papel que juegan los periodistas actualmente, ¿que es hacer periodismo en esta época?
Es muy amplia la pregunta, esto es como tirar una piedrita y empieza a hacer círculos. Pero empiezo por el circulo mas amplio. Te puedo dar una respuesta o intentarlo por lo menos.
Que es hacer periodismo hoy en día…..¿el periodismo ideal o lo que se esta haciendo?
Porque lo que se esta haciendo no es periodismo, es una mecánica en la cual determinado tipo de intereses tienen medios de comunicación que son pregoneros de esos intereses, pueden ser intereses políticos, lo cual seria mucho mas aceptable, porque toda la vida hubo ideologías, entonces hay diarios que por supuesto van a combatir gobiernos que son progresistas desde sus criterios liberales, pueden haber diarios que sean de izquierda que en tiempos de gobiernos liberales también lo critiquen desde una posición ideológica, la novedad que tenemos en el periodismo es que hay otros tipos de intereses que están jugando detrás de los medios de comunicación, que salen a defender esos intereses, estamos hablando fundamentalmente del grupo Clarín a través de lo que llamamos la libertad de expresión. Hace algunos años, yo no la recordaba, pero me la puso en mi cabeza un oyente, parece que Chacho Jarolavsky decía, “parece que hay órganos periodísticos que critican como partidos políticos y se defienden con la libertad de expresión”. Pero aquello estaba referido a una cuestión un poco mas ingenua si se quiere, comparada con la que hoy se da. Hoy el periodismo es intereses mas libertad de empresas , mas libertad de expresión para el punto de vista de ellos. Libertad de expresión que esta bastante lejos como ideal de lo que ellos propugnan, justamente para que le sirva como herramienta y como espada para sus intereses.
Usted defendió mucho la nueva Ley de Medios que seguramente cambia este esquema, pero los que están en contra critican casi todo de la ley, otros la ensalzan sin límites, ¿cuáles son las bondades y las inconveniencias de la ley?
Las bondades de la ley nueva son la ley en si misma. Es un ordenador de la vida periodística, poniendo los jugadores mas o menos en el mismo lugar en el punto de partida, porque hubo muchos proyectos, como cien, de los cuales yo alguna vez, muy por arriba había leído alguna vez. Esta ley otorga indudablemente una enorme participación a todas las actividades e instituciones importantes de la vida del país. Las ONG, los gremios, las instituciones indigenistas. Esto implica una pluralidad de participación que nunca hubo, a la que no se accede hoy en día. Una ONG o un grupo indigenìsta generalmente están mendigando en los medios para que les hagan una nota para poder tener repercusión con sus temas, muchas veces urgentes. En este caso, tendrían sus propios medios para comunicar lo que quieren decir, además, ampliaría en mucho la posibilidad de trabajo. Muchos mas medios es una posibilidad de mas trabajo. Como ejemplo, tenemos a mi operador de la mañana trabajando en mi programa y esta trabajando para diez radios, esta sacándole el trabajo a nueve operadores, por lo tanto, una cosa es que una radio tome por propia voluntad mi programa y otra cuestión es que alguien simplemente levante una clavija. Esa radio puede tomar un programa que le gusta, para calentar la pantalla, para calentar el dial, pero después tiene que tener sus propios programas, ¿sino para que se tiene una radio?, ¿para repetir lo que se dice en la capital? ¿Le interesa al habitante de Jujuy el tránsito a las 8 de la mañana en Buenos Aires?.
Pero lo mas importante es que esta ley tiene como hecho absolutamente extraordinario que es una ley antimonopolio, es eso lo que les duele. Todos los que están en contra, es por que es una ley antimonopolica y son los trabajadores o soldados del monopolio, o alcahuetes del monopolio, o los temerosos del monopolio, o los adversarios juramentados del gobierno, a los que todo les va a parecer mal. La ley es maravillosa y yo le deseo a la Argentina, mucho mas que un campeonato mundial de fútbol, que salga la ley de medios.
Hay un debate desde esta fuerte defensa de la ley de medios en cuanto a su postura con respecto al gobierno nacional. Algunos lo tildan de oficialista, otros no… ¿Qué le responde a esas críticas o afirmaciones de que esta alineado con el gobierno?
En la ley de medios es donde me endilgan determinado tipo de comportamiento. Cuando paso lo del campo , inmediatamente vino la discusión de las AFJP. Yo estuve abiertamente a favor de la medida de estatización que tomaba el gobierno, es mas, creo que es la mas formidable medida que tomó este gobierno. La ANSES al servicio de proyectos que den trabajo, oportunidades a la gente, etc. En ese momento, nadie se molesto por lo que estaba diciendo y estaba a favor del gobierno en una cosa muy, pero muy política. Porque esa si era una medida progresista, pero no de ninguna manera afectaba los intereses de los medios de comunicación, entonces no lanzaron esta locura por la cual, al sentirse agredidos por el gobierno con la nueva norma, los medios envenenaron al país, con lo cual, el margen para decir algo que sea positivo para el gobierno es mínimo sin que te acusen de pertenecer al gobierno. Vos olvídate de mi. Fijate en el diario Perfil. Tuvo una discusión de dos o tres semanas al mas alto nivel porque Perfil, que es un diario que claramente no es oficialista, fue acusado de oficialista por el diario Clarín.
Clarín puso una nota en la cual decía: “Perfil y Miradas al Sur un solo corazón”, solo porque Perfil en un tema había estado de acuerdo con el gobierno. No se lo perdono Clarín, o sea que Perfil tuvo que dar explicaciones de que no es oficialista, imaginate las que tendría que dar yo, que soy mucho mas chiquito. Entonces lo que tenes que esperar es que los miserables pierdan y es miserable el comportamiento de los que quieren ver las cosas de esa manera y solo van a perder a través del tiempo. Ya va a aparecer el tiempo, yo no lo voy a buscar, en el cual tenga que ser muy critico del gobierno. Fijate que mi principal problema este año fue a fines de febrero cuando se produjo el tema de los dos millones de Kirchner. En la ultima semana del mes de febrero, varios meses después de la ley de medios, yo fui atrozmente critico de Kirchner, o sea que no tenia ningún problemas en criticarlo a este hombre, salvo que metí la pata, y dije una injusticia respecto de El, y las injusticias las reparo. Estuve lunes y martes de la ultima semana de febrero, hablando de la manera mas dura que se puede hablar contra el ex -presidente, lo cual es altamente indicativo de que no tenia ningún compromiso con el. Pero ocurrió que Kirchner me llama y me dice, “mire Víctor Hugo, le quiero aclarar porque compre esos dólares” y me resultó creíble lo que me contó. Comprendí que había cometido una injusticia y tengo que repararla porque soy una persona de bien, o aspiro a ser una persona de bien. De no ocurrir ese llamado la critica hubiese seguido, prosperado y habría avanzado en la injusticia, con lo cual, cualquier persona que diga que hay un comportamiento oficialista esta ignorando esa y tantas otras criticas. Hoy justamente, estuve hablando de la ley de glaciares y he criticado al gobierno duramente. Al tema Jaime, le he dedicado largos tramos del programa tratándolo de lo que es o sobre actuaciones del comportamiento de la presidenta por ejemplo, en el discurso del 1 de marzo, de la Legislatura.
Pero cada vez que le salís al cruce de la información aviesa de los medios que manipula Clarín, manipula prácticamente a todos, y por ejemplo, saca el tema de las coimas en el comercio con Venezuela, y te das cuenta que el tema de las coimas es que hay un embajador que dice que hace seis años escucho algo y no hay nada mas que eso, con lo que escriben cuatro paginas. O vos te resignas y decís no me meto con esto, que digan lo que quieran, o vos haces periodismo y decís: “esto, en si mismo, no es verdad”. Si a mi me dicen que el gobierno es corrupto, porque seguramente en ese fideicomiso hay algún interés de gente de acá, es un tema para el boliche, pero no es un tema para los medios, nosotros tenemos que tener pruebas, elementos serios, sino es lamentable la información y falsa.
Paso con Cobos, involucrado en tema las coimas con Venezuela. En Clarín no salió nada y en Perfil salió en la tapa. La Nación publicó una columna dura contra Cobos por ese y otros temas. La Nación es un poco mas creíble que Clarín, porque discrepa con el gobierno ideológicamente, en cambio Clarín discrepa por intereses, ni siquiera discrepa ideológicamente porque Clarín no tiene ideología. La Nación es liberal y es un medio que cree que el papel del estado debe ser mínimo, cree en el libre mercado, y de toda la vida es así, entonces, critica al gobierno desde ese lugar. Clarín critica al gobierno desde un lugar de una empresa que esta defendiendo 260 canales robados. Esto es muy distinto.
Hasta que mejore la situación con la nueva ley, ¿Cómo cree que tendrían que actuar los periodistas, los nuevos por ejemplo, frente a esta situación de medios pertenecientes a conglomerados económicos?
No tienen que plantarse en ninguna postura en particular, tienen que ser lucidos. Si pueden trabajar dentro de esos medios, no hay que negarse a trabajar, hay que buscar la manera de trabajar, hay muchas cosas que se hacen en el periodismo. Un joven periodista, en general, salvo excepciones, no vas a tener opinión ni siquiera firma. Va y trabaja como periodista, hace sus notas, sus crónicas, participa de la vida periodística, y nunca debería proceder innoblemente, y de acuerdo al sistema, nunca preguntar de acuerdo a lo que sabes que el diario quiere que preguntes, sino a lo que vos sabes que podes preguntar. Es como en los tiempos de la dictadura, uno mas o menos puede ingeniárselas para hacer y decir cosas, es una relación diaria: tirar la piedra y esconder la mano. Es estar atento y alerta, tomar su sueldo, darles el trabajo mas honesto que se pueda hacer desde ese lugar. Si a alguien le mandan a hacer una nota , “escribí sobre el piquete de Delia a las 11 de la mañana en Puente Pueyrredon”, eso es hacer periodismo también, o cubrir un congreso contra la lucha contra el cáncer. Un periodista tiene que hacer millones de cosas antes que tener que opinar. Si escribís una buena nota y empezas a tener tu punto de vista, ahí si tenes que pelear un poquito mas, tenes que negociar, discutir, alguna vez se gana, alguna vez se pierde, pero siempre hay manera de no venderse. Si se esta lucido, en algún momento pegará el salto para donde mejor se sientas, ya elegís vos que hacer con la profesión.
En los medios se discutió mucho la gran afluencia de gente con los festejos del Bicentenario, hasta Clarín puso en tapa que mas allá de las diferencias fue una fiesta inmensa. ¿cual es su opinión de esa masiva respuesta del pueblo a ese festejo?
Sería lindo no dejarnos devorar por la actualidad, proteger un poco la buena noticia, nosotros en el devenir de la información, tomamos un asunto le damos hasta gastarlo y pasamos rápido a otra cosa. Me parece que durante un tiempo es grato que podamos seguir compartiendo con quienes piensan, con quienes analizan, que ocurrió en estos benditos días del Bicentenario. Cuando se dio una respuesta muy extraordinaria de parte de la gente en cuanto a lo que quiere, a lo que desea, a lo que sueña y a la capacidad de confraternizar, de llenar las calles de gente entusiasmada con grandes espectáculos, con grandes desfiles, pero también con alegría en el corazón, porque no se puede actuar así si no se está a buenas con la vida. No hay manera de recorrer caminos si se esta muy golpeado, muy entristecido, cuando llegan estos acontecimientos. La gente no se cambia de ropa como Superman, no es como Clark Kent saliendo a socorrerse a si mismo. Millones de personas han celebrado como nunca se vio, sin necesidad de un gol de Diego, de un gol de Messi, de un triunfo de la selección argentina, de un triunfo del básquetbol. Yo que muchas veces relatando un partido me imagine a la gente saliendo hacia el obelisco a festejar. En esta ocasión no fue necesaria ninguna victoria, nada absolutamente para que la gente saliera a abrazarse, sonreír, saliera de la mano con sus hijos y no tuviese ningún tipo de miedo que no le permitiese venir al centro de Buenos Aires y por suerte, como premio, no se produjese ni una corrida, ningún incidente. Hay que dejarse llevar por este acontecimiento, como si fuera una luz que de pronto pudimos encender. Caminemos también por esa luz, no siempre por la oscuridad de la banquina.
Por Ricardo Guaglianone