Las calles de Buenos Aires
Esta calle corre de Sur a Norte. Antes se llamaba Dublín y luego Sud América Tiene un largo recorrido y atraviesa Flores, Villa Mitre, Paternal, Villa Del Parque, Agronomía y termina en Villa Pueyrredon,. Su designación actual se realizo mediante la ordenanza municipal 196 el 20 de agosto de 1919 y por otra la 514 del 28 de noviembre del mismo año. Nace en Av. Rivadavia y termina en Albarellos al 2500.
Artigas fue militar, nació en Montevideo el 19 de junio de 1764. Se educò en el colegio de San Bernardino de los padres Franciscanos y fue condiscípulo de los futuros generales De Vedia, Rondeau, De Vianan y del padre Larrañaga. Trabajaba en el campo, en los establecimientos de su familia y en 1997 se incorporo al ejercito como soldado en el Cuerpo Veterano de Blandengues de la Frontera de Montevideo. En 1998 fue ascendido a ayudante mayor de caballería de Blandengues y luego el Rey Carlos III lo designo capitán. Colaboro con Félix de Alzaga en la demarcación de limites con Portugal. Lucho contra los portugueses que en 1801 invadieron la Banda Oriental y en 1806 tomo parte en la lucha contra las invasiones inglesas. Actuó con Liniers en la Reconquista de Buenos Aires el 12 de agosto de 1810 y rindió el parte de la victoria en Montevideo. Se adhirió a la revolución de mayo de 1810, fue allí que abandona su ejercito y se presenta en Buenos Aires para ofrecer su espada. La junta lo ascendió a teniente coronel y le confió la segunda jefatura del ejercito patrio a las ordenes de Belgrano.
Artigas invadió la Banda Oriental al frente de 250 veteranos porteños, sublevo la Provincia y logro en El Colla (Colonia), San José y Santa Teresita los primeros triunfos militares de la Revolución. El 18 de mayo de 1811 aniquilo a los españoles en Las Piedras y en ese año a raíz del un armisticio firmado en octubre se puso al frente del éxodo del pueblo oriental, conocido popularmente como Marcha de la Redota. Estableció el campamento en Ayui en suelo entrerriano y desde allí comenzó su larga labor política que culmino con las “Instrucciones” de abril de 1813 y en dos proyectos constitucionales complejos, :provincial uno y nacional el otro.
Esos principios dieron la base ideológica al posterior movimiento federal argentino. Firmo con el comisionado de Buenos Aires el primer pacto de Integración Nacional y el 19 de abril de 1813 la Banda Oriental se incorporo a las Provincias Unidas
La asamblea General Constituyente, dominada pro unitarios bonaerenses, rechazo los poderes de los diputados orientales y encendió la chispa de la primera contienda rioplatense. De ese conflicto surgió al leyenda negra que ensombreció la recia personalidad del Jefe de los Orientales. Fue Sarratea el primero en declararlo “traidor” pero los jefes u oficiales del ejercito argentino se reunieron en Junta y rechazaron la injusta y gratuita acusación removiendo del mando a Sarratea.
Artigas asumió entonces, la segunda jefatura a las ordenes de Rondeau. El director Posadas reincidió en la acusación pero luego lo califico de un buen servidor de la patria. También en 1815, fue Alvear quien lo detracto, pero el Cabildo ordeno quemar los decretos y le obsequio un reloj de oro en reconocimiento a Artigas.
En el Espinillo, en Guayabos, en Santa Fe, venció Artigas a sucesivas expediciones punitivas de tropas porteñas a las ordenes de los coroneles Holmberg, Dorrego, Viamonte y Diaz Velez. Cuando comenzó la discrepancia sobre sus ideales federales con el gobierno Central, Artigas hallo pleno apoyo en los entrerrianos que se incorporaron a al Liga de los Pueblos Libres de la que el caudillo oriental era protector.
En 1815 llegó a Paraná para apoyar el movimiento federalista de Santa Fe y la revolución que depuso a Alvear. Bajo si influencia y ejerciendo la presidencia organizó en Concepción el llamado Congreso de Oriente que ratificó las instrucciones por el escritas y la Convención Oriental de 1813, se fundo así, la primera liga de provincias. Sus ideas básicas eran la Ley de Protección de Aduanas, el Reglamento Provisorio de Tierras que atacaba el latifundio y alentaba la creación de una clase media rural de pequeños propietarios. Artigas era un defensor de las comunidades indígenas a las que protegía contra la marginación.
Una comisión del Congreso llego a Buenos Aires en procura de un acuerdo general. El Directorio insistió nuevamente en la independencia oriental ofreciendo el Río Paraná como línea de demarcación. La Comisión, Artigas y el Congreso rechazaron la oferta. Fue entonces que el Monaquismo portugués en auge con el apoyo del gobierno de Buenos aires provocó la invasión lusitana con el ejército imperial que Artigas combatió durante cuatro años hasta que sus fuerzas fueron aniquiladas en Tacuarembo en 1820.
En Septiembre de ese año, abatido por la adversidad, sin armas y sin soldados, reunió el dinero que le quedaba y se lo envió los oficiales presos en Río de Janeiro, traspuso el Paraná y se exilió en Paraguay donde se dedicó al cultivo de la tierra para subsistir. Allí murió, en Ybiray, cerca de Asunción, el 23 de septiembre de 1850.
