El 20 de agosto de 1995 representantes de 15 radios comunitarias del país realizaron una asamblea en la sede de ATE Nacional. Allí nacía el Foro Argentino de Radios Comunitarias, del que un cuarto de siglo después forman parte cerca de 120 emisoras gestionadas por organizaciones sin fines de lucro.
Si bien el nucleamiento entre radios ya existía a partir de asociaciones regionales denominadas ARCO (Asociación de Radios Comunitarias) y una federación nacional (FARCO-Federación Argentina de Radios Comunitarias), en dicha asamblea se le dio un nuevo marco en el que las radios confluyeron directamente en la asociación de carácter nacional.
Además de la defensa de los medios y la promoción de políticas públicas en relación a la comunicación, FARCO fue avanzando en la producción de contenidos comunes y en las instancias de formación.
La lucha por la legalidad que les negaba la ley de la dictadura tuvo un recorrido con varias escalas hasta la estación final del 9 de octubre de 2009, cuya parada principal fue la conformación de la Coalición por una Radiodifusión Democrática. En 2004, junto a ostras organizaciones sociales, gremiales, civiles y de derechos humanos, presentó los 21 puntos que serían el embrión de la nueva ley, primera surgida en democracia.
Con los años, la incorporación de radios y el crecimiento de la red, a este informativo se le sumaron otras producciones como la agencia de noticias, y los envíos semanales Expreso FARCO, con informes de interés general y Que Suene, en el que cada radio da cuenta de algún número musical de su localidad.
Al igual que para el conjunto del pueblo trabajador, los últimos 4 años no fueron fáciles para los medios populares. Las cuentas pendientes tras la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual no habían terminado de saldar, y la pandemia de coronavirus también puso a prueba a las radios de FARCO.