Javier Milei miente desde el primer día que asumió. El 10 de diciembre dijo con énfasis, que se terminaba por un año, la publicidad oficial para los medios. “¿Queremos ser libres? Seamos libres en serio: pauta cero”, grito ante el Congreso para explicar que “no había plata” ni para dar a conocer los actos del Gobierno en la prensa.
La publicidad oficial se utiliza casi siempre, para premiar a los amigos que aplauden y para apretar a los medios que critican la gestión. Para los aliados al gobierno, podemos decir que el grifo se abrió con mucha generosidad.
Ahora el gobierno no pauta a través de Presidencia de la Nación, sí lo hace por intermedio de otros organismos estatales como Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), Aerolíneas Argentinas y el Banco de la Nación. En total, de enero a junio, YPF lleva gastados más de 125 mil millones de pesos en pauta oficial, fundamentalmente en televisión. Aerolíneas y el Banco Nación son más modestos, pero también ayudan: 547 millones pautó la primera empresa y 539 millones la segunda. Sumando todo, el resultado arroja $ 126.505.339.992.
En YPF trabaja Guillermo Garat, quien ostenta el cargo de vicepresidente de Relaciones Institucionales, Comunicación y Marketing, maneja la relación con los medios.
Los empresarios del rubro periodístico coinciden en que es Caputo el que distribuye “a dedo” la publicidad oficial entre los aliados mediáticos de La Libertad Avanza, y que su amigo Garat, desde YPF, simplemente ejecuta la orden.
En Aerolíneas Argentinas y el Banco Nación, cajas que, en lo que va del año, distribuyeron más de 500 millones de publicidad oficial cada una, son dos reparticiones estatales que no dependen directamente de Presidencia. ¿Por qué el Gobierno terceriza la pauta a través de esas dependencias?
Desde YPF, una de las empresas demandadas por medios que argumentan discriminación de recursos, la respuesta fue insólita: argumentaron que la petrolera no tenía que rendir cuentas sobre el criterio usado para distribuir su publicidad oficial porque se trata de “una empresa privada”.
Hay una cuarta caja del Estado que se agregó en agosto, la de la AFIP, que gastará 1.500 millones de pesos mensuales en pauta oficial para su campaña sobre el blanqueo de capitales y que continuará, según estiman en el oficialismo, hasta marzo del año que viene.
Ahora, otra vez, un gobierno vuelve a usar la publicidad oficial como método de premios y castigos, como garrote y zanahoria y además, no solo discrimina a medios nacionales que lo critican, sino que deja tirados a medios más chicos, que sin pauta, muchos de ellos van a desaparecer.
