El hígado graso es una acumulación de grasa que provoca un desequilibrio entre el aporte y la eliminación de triglicéridos, un tipo de grasas en las células del hígado. Los ácidos grasos que se utilizan para la formación de triglicéridos en el hígado derivan de la dieta, la síntesis y del tejido graso acumulado en el cuerpo.
Cuanto mayor sea el contenido de grasa en una dieta o el organismo no pueda metabolizar rápidamente la grasa consumida, mayor será el exceso que se encontrara en el hígado.
La frecuencia de esta enfermedad está aumentando a nivel global, asociada a la prevalencia creciente de sobrepeso/obesidad, síndrome metabólico y diabetes
Principales causas:
- -Sobrepeso u obesidad
- -Resistencia a la insulina o diabetes tipo 2
- -Concentraciones anormales de grasas en la sangre, que podrían incluir: concentraciones altas de triglicéridos
- -Síndrome metabólico
- -Ciertos fármacos
- -Enfermedades autoinmunes
- Las mujeres son más propensas a padecerlo.
- No suelen ser evidentes, pero se pueden sentir:
- -Cansancio
- -Debilidad
- -Dolor en la parte superior derecha del abdomen
- -Pérdida de peso
- -Pérdida de apetito
- -Ictericia
- -Hemorragias nasales
- -Acumulación de líquido en el cuerpo
- -Aumento de las mamas en hombres…
Créditos: Pexels / Valeriya Kobzar
La comida chatarra es el enemigo
Carbohidratos simples, azúcar, edulcorantes, harinas blancas, procesados, frituras, refinados, hamburguesas y pizzas precocinadas o industriales, bollería, refrescos, jugos envasados, galletas, cereales azucarados…
Un ejemplo bien claro: el jarabe de maíz alto en fructosa que se encuentra en infinidad de productos envasados afecta al hígado en la misma forma que lo haría un alto consumo de alcohol.
Cambie los carbohidratos simples por complejos como: frutas, verduras, tubérculos, arroz, harinas integrales… El consumo de carbohidratos procedentes de alimentos saludables como verduras debe estar ajustado al gasto diario por actividad física para evitar su acumulación como triglicéridos en el hígado.
Aumente la colina o vitamina B7: esta vitamina se encuentra en el hígado de ternera, riñones, salmón, arenque, brócoli, garbanzos, coliflor, espinacas, semillas de calabaza, berenjenas, huevos, levadura, aguacates, plátanos, nueces…
Como tratar y limpiar el hígado graso:
Perder peso, una dieta adecuada y actividad física son sus armas para combatir esta enfermedad.
Un 5% de grasa en el hígado es el objetivo, más de eso conduce a un aumento del riesgo de padecer hígado graso.
El porcentaje de grasa corporal no debería superar el 25% de la masa corporal total en la mujer y el 30% en el hombre adulto, para evitar la acumulación de grasa en los órganos como el hígado.
Valores Normales de grasa corporal (%) según edad y sexo
Edad Hombre Mujer
20-29 7-17 % 16-24%
30-39 12-21 % 17-25%
40-49 14-13% 19-28%
50-59 16-24% 22-31%
+ 60 17-25% 22-33%
Dieta Mediterránea
La dieta mediterránea se implementa contra el hígado graso y se trata de consumir, nueces, frutas, verduras, legumbres y pescado, alimentos que poseen un alto aporte de fibra, fitoquímicos y ácidos grasos omega 3. Son alimentos antiinflamatorios que ayudan a regular grasas y azúcares
La vitamina E (aceites, nueces, verduras de hoja verde como el brócoli y las espinacas, semillas como la soja, el germen de trigo, la levadura de cerveza, yema de huevo) y vitamina C (papaya, kiwi, frutas rojas y piña, pimientos, brócoli, col rizada, coliflor… )
Estos alimentos reducen la inflamación en el hígado. Una deficiencia de vitamina D se asocia con el desarrollo de hígado graso. Es importante incorporarla, sobre todo D3 (colecalciferol) para corregir las enzimas hepáticas incrementadas y el hígado graso, efecto que no se logra solo con la vitamina D.
La mejor forma de obtenerla es el sol, si es posible totalmente desnudos. Esta vitamina se encuentra en mariscos, salmón, arenques, atún, sardinas, bonito, carne de pollo, ternera, conejo, hígado de ternera, de pollo, yema de huevo, queso curado, champiñones…
Existen súper alimentos para el hígado graso:
Ajo: actúa sobre una proteína AMPK y evita el aumento de las grasas en el cuerpo. Antibiótico y antiinflamatorio, depurativo de grasa y colesterol. Crudo mejora la resistencia a la insulina y el metabolismo de los lípidos.
Café: reduce la acumulación de grasa en el hígado y ejerce un efecto protector contra el cáncer de hígado al disminuir la inflamación y el estrés oxidativo de las células.
Bayas de goyi: ricas en betacarotenos, vitamina C, minerales y polisacáridos, contienen betaína y betasitosterol, principios activos útiles para reducir el colesterol y evitar el hígado graso, pero destaca la presencia de sustancias antioxidantes como carotenoides, zeaxantinas y xantófilos.
Cardo mariano: contiene silibina y flavolignatos como la silimarina, betacarotenos y flavonoides con poder hepatoprotector, antinflamatorio y antioxidante que previenen las complicaciones del hígado graso. Además, estimula la proliferación de nuevas células en el hígado.
ES MUY IMPORTANTE 👉 Ejercicio y control de peso.
Fuentes: Dr. Antonio Díaz Sánchez / Hospital Cruz Roja, Córdoba. Revista / revista de gastroenterología de México
