Con opiniones diversas por la posible implementación del protocolo contra la toma de colegios, se conocieron detalles de la polémica medida del Gobierno porteño contra las huelgas en establecimientos educativos.
El gobierno porteño dio a conocer detalles del protocolo que busca terminar con las tomas de escuelas en el próximo ciclo lectivo, para lo cual estableció una serie de pautas, a riesgo de sanciones para docentes, directivos y padres de alumnos y alumnas.
La norma establece que en el caso de una toma, los directores deberán citar a los padres de los estudiantes para que retiren a sus hijos del colegio. Si los padres apoyan la ocupación del colegio serán ellos quienes se responsabilicen de los posibles daños del lugar.
En caso de una ocupación, los rectores o directores deberán permanecer en las instalaciones hasta que las acciones determinadas por el protocolo finalicen. El Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y el SAME serán los organismos encargados del chequeo de la situación.
Una vez finalizado el protocolo las autoridades relevarán un acta al Ministerio de Educación con los motivos de la toma, la situación del patrimonio escolar documentado con fotos y los datos de los padres que no retiraron a sus hijos del colegio. El expediente realizado a partir del acta será enviado a la Procuración General por parte del Ministerio de Educación de la Ciudad.
Terminada la toma, los responsables del establecimiento realizarán otra nueva acta que detalle la situación del patrimonio escolar en ese momento.