En la ciudad de Buenos Aires se está dando la situación de muchos contagios de virus en establecimientos privados y públicos, aunque es llamativo la cantidad de casos en instituciones médicas públicas, que no tienen una asistencia importante del gobierno de la ciudad para proteger a los médicos y enfermeros de la posibilidad de contagio por falta de elementos de seguridad. En este caso se suma el hospital Ramos Mejía, donde el Subdirector Médico informó que habiendo detectado la infección de tres enfermeras con COVID-19 positivo y 38 agentes en cuarentena, su Dirección Médica se ve en la obligación de cerrar el Servicio de Neonatología y por ende el Servicio de Obstetricia.
